Una vez que comienzas a invertir en propiedades, tu patrimonio es lo primero que cobra relevancia. Por eso te recomendamos que sepas bien las maneras que existen para aumentar el valor de este conjunto de bienes y entiendas por qué es tan bueno hacerlo de la mano de la inversión inmobiliaria.
En palabras simples, el patrimonio es un conjunto de bienes propios que puede tener una persona o institución, y que son susceptibles de estimación económica, esto es, son activos y, por ende, es posible asignarles un valor monetario.
En la esfera personal, este cálculo económico corresponde a la diferencia entre lo que se posee en bienes (puede ser un televisor o automóvil, o también propiedades inmobiliarias) y las deudas.
Si tu idea es aumentar tu patrimonio año a año, una alternativa segura y confiable es a través de la inversión inmobiliaria.
A continuación, te explicamos tres razones por qué.
1. Ganancia de capital
La ganancia de capital es el beneficio obtenido a través de la administración de activos de capital (bienes inmuebles en este caso), cuando el monto alcanzado, después de una transferencia entre dos partes, supera el precio de compra.
Por ejemplo, en el caso de un departamento que adquieras con subsidio habitacional y que hoy, habiendo comprado otra propiedad como la definitiva, decidiste poner en arriendo; entonces tu ganancia será igual a todas las mensualidades que percibas después de terminar de pagarlo al banco (o al ex dueño si cancelas al contado).
Ahora bien, existe un impuesto extra para la venta de inmuebles adquiridos a partir de 2005 y cuya ganancia supere las UF 8.000.
Así, la ganancia de capital de algunas propiedades se reduce en base a un tributo sustitutivo, que exige el pago inmediato de un 10% de la utilidad; o bien se puede pagar mediante la aplicación de un impuesto imponible, el cual se suma a la base imponible del inversionista, quien tendrá que pagar posteriormente este mismo porcentaje de su ganancia de acuerdo a la tasa que le corresponde.
Un buen ejemplo de este cobro es el que aparece en este documento sobre la reforma tributaria de Deloitte, a partir de la página 8.
2. Flujo
Cuando las personas deciden vender o poner en arriendo alguna propiedad, actúan inteligentemente, porque comienzan a generar flujos alternativos a sus ingresos regulares, pudiendo no sólo disminuir su estrés financiero, sino que también incrementar su patrimonio.
Con flujos, me refiero a ingresos como, por ejemplo, las ganancias por nuevos negocios, alquileres o arriendos, subsidios hipotecarios y cualquier otra entrada de dinero.
Por esto, si decides tener flujos de ingresos múltiples a través de la inversión inmobiliaria, poco a poco aumentarás tu patrimonio, gracias a que dispondrás de un porcentaje mensual para continuar generando nuevas adquisiciones de inmuebles.
Con un flujo sostenido en el tiempo, llega la tranquilidad financiera. Sobre todo, cuando te das cuenta que más vale aumentar tu patrimonio que juntar grandes sumas de dinero en efectivo. Así, podrás ahorrar para comprar un estacionamiento en el centro y arrendarlo, o evaluar los distintos créditos hipotecarios para ver si el cobro de un arriendo alcanza para el pago del inmueble, entre otras acciones de un empresario exitoso.
3. Amortización del crédito
Por último, si ya estás dentro de este mundo, sabrás cómo operan los créditos hipotecarios y lo beneficioso que resulta poder liquidar lo más pronto posible una deuda de este tipo. Puede que hayas negociado una gran tasa de interés, pero así y todo, siempre es mejor poder amortizar el crédito.
Esto, porque cuando pagas cada una de las cuotas, no estás necesariamente descontando deuda, sino que más bien cancelas intereses. De aquí la importancia de acelerar el fin del contrato del crédito hipotecario, para posteriormente mejorar tus flujos y también aumentar tu patrimonio, porque te será más sencillo pedir otro préstamo en caso de necesitarlo.
¿Cómo amortizar un crédito? Puedes pre pagar de forma anticipada total o parcial, según la fecha con que se haya firmado el contrato. En el caso del prepago parcial, debe ser acorde a lo pactado en la escritura de la compraventa, pudiendo reducir el valor del dividendo o el plazo, siempre y cuando el ente crediticio ofrezca esta alternativa. De esta manera, la deuda disminuye, mientras que el dividendo se reajusta a un menor valor.
Conclusión
Ahora que ya tienes claras las formas de incrementar tu patrimonio a través de la inversión inmobiliaria y también conoces los beneficios de la misma, te invitamos a seguir informándote en el tema.
Este tipo de inversión te ayudará a tener un mayor control del dinero y a mejorar tu calidad de vida, así como también a alcanzar la seguridad y libertad financiera que tanto buscas.
¿Quieres saber más? Consulta aquí sobre las virtudes y beneficios de ser inversionista en propiedades.
Deja tu comentario