Una de las preguntas principales que aparecen a menudo en nuestros webinars, cursos y asesorías es la duda sobre los impuestos. ¿Qué impuestos se pagan en la inversión inmobiliaria? Tanto si estás pensando en invertir en bienes raíces como si ya lo hiciste pero no sabes de qué manera declararlo, aquí te explicamos las claves para que procedas de forma correcta. Tendrás que considerar el tipo de vivienda, su finalidad, su tamaño y otros aspectos que explicaremos a continuación.
Para cumplir con tus obligaciones tributarias, ten en cuenta procedimiento a seguir a la hora de declarar los impuestos en general es incluir las ganancias y las pérdidas al año siguiente de cuando se produjeron. Así, por ejemplo, si en el año 2019 compras un departamento para invertir en bienes raíces, la declaración de 2020 deberá incluir esta adquisición.
El plazo para presentar la renta de 2018 es:
El pago en línea se puede efectuar mediante tarjeta de crédito o a través de la cuenta corriente. Además, se puede realizar el pago con mandato al banco en cuenta corriente, o el pago al vencimiento con mandato al banco.
Además, hay otros impuestos asociados a los bienes raíces, como el impuesto de timbres y estampillas en la primera transferencia o el arancel de inscripción en el Conservador de Bienes Raíces.
Se debe presentar la declaración de la renta anual en caso de ser una persona que como dependiente o independiente haya obtenido ingresos de un monto superior a $7.609.464. Además, todas las empresas deben declarar su renta, tengan ventas o no.
Están exentos de declarar su renta:
La gran pregunta que nos suelen hacer es si elegir uno u otro tipo de bienes raíces a la hora de invertir en propiedades impacta en cuánto se pagará de impuestos. Se debe tener en cuenta si el inmueble es para uso habitacional o bien de tipo industrial o comercial. Además, también depende de si se compra en blanco, verde o entrega inmediata.
Además, las propiedades DFL2 tienen una serie de ventajas fiscales añadidas a la hora de invertir en propiedades, siempre que no se superen las dos por titular. Se trata de viviendas con un máximo de 140m² útiles (excluyendo estacionamiento, piscina y jardín).
Una de las ventajas de adquirir bienes raíces mediante crédito hipotecario, además de que no detienes la capacidad de inversión ni te descapitalizas, es que puedes deducirte impuestos. Al precio final de la vivienda comprada deberás sumarle si compras al contado el monto de los impuestos que no podrás desgravarte si utilizas ese medio de pago.
Para conocer más sobre cómo declarar impuestos en propiedades, será mejor solicitar la colaboración de un asesor inmobiliario que respalde cualquier decisión en tu futura inversión inmobiliaria.