Compras un departamento, solicitas un crédito hipotecario y cuando ya tienes todo firmado y comienzan a pasar los meses, piensas que tal vez no elegiste el tipo de tasa que más te interesaba. ¿Es tu caso? Hoy queremos contarte que la tasa de interés puede cambiar con el tiempo. Aparte de que la tasa mixta pasa de fija a variable, una persona activamente puede cambiarla si lo desea. Conoce en qué consiste este trámite y qué se necesita para poder implementarlo.
Como ya sabes, la principal diferencia entre los tipos de tasas hace referencia al monto del dividendo a pagar, que en un caso queda fijado (la tasa fija), en otro de forma limitada (la tasa mixta) y en el otro va cambiando con el tiempo (la tasa variable). Ahora bien, supongamos que elegiste una tasa variable y quieres cambiar a una tasa fija después de un tiempo, ¿podrías hacerlo? En determinadas circunstancias sí, como vamos a ver a continuación.
¿Puede cambiar una tasa con el tiempo?
En principio, la tasa de un crédito hipotecario no se puede modificar en ningún caso, y por eso se debe escoger con mucha precaución. Ten en cuenta este punto si quieres ser inversionista y comprar, o deseas una hipoteca para tu propia vivienda: no podrás cambiar la tasa con el tiempo. Si eliges una tasa fija, siempre pagarás la misma cuantía de dividendo, y si eliges una variable irá modificándose con la TAB. En caso de que hayas elegido una tasa de tipo mixto, podrás aprovechar una primera fase a tipo fijo, para que después de un periodo previamente marcado se cambie a tasa variable.
Con todo, debemos tener en cuenta que en cierta medida puedes variar la tasa voluntariamente con el tiempo. No podrás hacerlo sobre el mismo crédito hipotecario, pero sí tendrás esa opción en caso de refinanciamiento.
¿Qué es el refinanciamiento de un crédito?
Las instituciones financieras cuentan con la opción de refinanciar una deuda hipotecaria, disponible para los clientes. Este instrumento se puede utilizar para poder pasar de tasa variable a fija, si las condiciones del cliente permiten acceder a esta opción. También se puede usar la refinanciación para modificar el plazo de una hipoteca o incluso para reducir la tasa de interés en determinadas circunstancias.
Los bancos chilenos suelen pedir una serie de requisitos para refinanciar:
- Certificar un buen histórico de ingresos y de empleo
- Historial impecable de pagos del crédito anterior
- Nueva tasación de la vivienda para poder saber su valor en el mercado actual
Hay que tener en cuenta que una persona puede tener una determinada solvencia cuando solicita un crédito y otra diferente al intentar refinanciar. Según tu vida laboral y tus ingresos hayan ido a mejor o a peor, tendrás nuevas condiciones que puedes aprovechar o tratar de esquivar. Asimismo, las viviendas no tienen siempre el mismo valor, sino que se modifica con el tiempo. Mantén la atención en el mercado inmobiliario, y ten en cuenta que tu propiedad puede tener actualmente una tasación menor o mayor que cuando la adquiriste.
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