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¿En qué me tengo que fijar para sacar una cuenta corriente?

Escrito por Ricardo Asmuru | 26-nov-2024 11:46:21

Ya sea para recibir tu sueldo, pagar cuentas, invertir, ahorrar o acceder a otros productos financieros, elegir la cuenta corriente adecuada a tus necesidades es fundamental. Sin embargo, no todas las cuentas corrientes son iguales, y elegir la mejor opción requiere evaluar diversos factores que impactarán en tu rentabilidad y experiencia. Aquí te mostramos los aspectos clave en los que debes fijarte antes de tomar una decisión.

 

1. Tasas de interés y costos asociados

Algunas cuentas tienen un costo mensual por mantención. Compara las opciones y busca cuentas con costos bajos o incluso gratuitas, especialmente si tu saldo promedio será bajo. 

 

Además, infórmate sobre las comisiones por transferencias, giros en cajeros automáticos, uso de tarjetas de débito, etc. Elige una cuenta con comisiones bajas o que ofrezca un paquete de transacciones gratuitas. También averigua si hay un costo por la emisión o renovación de la tarjeta de débito asociada a la cuenta.

 

Si planeas mantener un saldo promedio alto en tu cuenta, busca opciones que ofrezcan tasas de interés atractivas para que tu dinero genere rentabilidad.

 

2. Porcentaje de puntos y recompensas

Algunos bancos ofrecen beneficios adicionales, como seguros de viaje, asistencia en el extranjero, descuentos en comercios o programas de puntos. Es importante analizar si el banco ofrece este beneficio y qué tan atractivo es el porcentaje de acumulación de puntos para maximizar el valor que obtendrás.

 

3. Beneficios de la tarjeta de crédito asociada

Las cuentas corrientes suelen estar acompañadas por una tarjeta de crédito. Evalúa los beneficios que esta ofrece, como descuentos en comercios, acumulación de millas, meses sin intereses o acceso a promociones exclusivas. Asegúrate de que los beneficios sean relevantes para tu estilo de vida y hábitos de consumo.

 

4. Servicio al cliente, app y web del banco

Un banco con un servicio al cliente accesible y eficiente puede ahorrarte muchos dolores de cabeza. Considera la calidad del servicio al cliente del banco, incluyendo la disponibilidad de canales de atención (teléfono, chat, sucursales) y la rapidez en la resolución de problemas.

 

Evalúa la plataforma digital del banco (sitio web y aplicación móvil) para asegurarte de que sea fácil de usar, segura y te permita realizar tus operaciones de forma rápida y eficiente.

 

En la era digital, contar con una buena aplicación móvil es fundamental. Asegúrate de que la aplicación del banco sea fácil de usar, rápida y completa.

 

Revisa si permite:

  • Realizar transferencias rápidas

  • Administrar tus productos financieros

  • Recibir notificaciones al instante

  • Acceder a atención al cliente en línea

  • Revisar tus informes financieros

 

5. Seguro contra fraudes

Los ciberataques son cada vez más comunes, por ello es muy recomendable contar con un seguro contra fraudes. Algunos bancos ofrecen este servicio de manera gratuita como parte de sus cuentas corrientes, mientras que otros lo cobran como un extra. Asegúrate de que el banco tenga medidas de seguridad robustas y un proceso rápido para resolver problemas en caso de fraude. Además, valora este tipo de costos extra ocultos al elegir la mejor opción y más rentable para ti.

 

6. Métodos de inversión vinculados

Algunos bancos ofrecen a sus clientes, a través de sus cuentas corrientes, la posibilidad de invertir en diferentes instrumentos financieros, como fondos mutuos, depósitos a plazo o plataformas de trading. Si estás interesado en hacer crecer tus ahorros, es conveniente optar por un banco que ofrezca opciones de inversión integradas y comisiones competitivas.

 

Conclusión

Elegir una cuenta corriente no es solo cuestión de abrir la primera que te ofrezcan. Analiza cada uno de estos aspectos y evalúa qué banco y tipo de cuenta se ajusta mejor a tus necesidades personales y financieras. Toma una decisión informada y te asegurarás de aprovechar al máximo los beneficios de tu cuenta corriente mientras minimizas los costos y riesgos asociados.