Si finalmente te has decidido a comprar un departamento o casa como parte de un proyecto de inversión personal, es una decisión importante que requiere planeación. Ya sea que estés pensando en comenzar una nueva etapa de tu vida o buscar una oportunidad de negocios para generar rentabilidad, requieres de buena asesoría.
El mercado inmobiliario tiene sus particularidades, por lo que resulta vital manejar algunas nociones básicas para encontrar lo que buscas. En aras de orientarte mejor si no cuentas con experiencia en este tipo de transacciones, revisaremos claves fundamentales que pueden servirte para hacer una elección acertada.
Claves para compradores inmobiliarios primerizos
- Comprar en blanco, en verde o mediante entrega inmediata
Dependiendo del riesgo que quieras asumir y tu disponibilidad de fondos, tienes estas 3 opciones al momento de adquirir una vivienda nueva. En la primera opción el proyecto está establecido pero no ha comenzado la construcción. La siguiente etapa representa la obra en proceso con un precio mayor (4 a 6%). En la última fase ya todo está listo para firmar. Cada una presenta sus posibilidades, riesgos y costos, por lo que necesitas establecer tus prioridades. La entrega en blanco tarda unos 2 años porque existe una garantía de cumplimiento y genera más plusvalía. Los otros casos requieren de mayor desembolso, pero la diferencia es que puedes ver cómo luce la propiedad y la entrega es más rápida. Mientras menos tengas que pagar por el inmueble, esto te permite ahorrar un poco más para cumplir con la cuota del pie, que ronda el 20% del costo total. Además, para obras en blanco tienes la oportunidad de contar con un plazo superior a los 24 meses para pagar dicho monto y la facilidad del crédito hipotecario.
- Ubicación, comparación y propiedades usadas
Parte importante del proceso de selección de una vivienda tiene que ver con su localización, lo cual te indica su plusvalía a corto y largo plazo. Lo ideal es escoger una zona con buen transporte, áreas verdes, conexión, centros comerciales, colegios y cerca del trabajo. Esto te garantiza la comodidad que se requiere y la revalorización de la casa o apartamento. Asimismo, en función del presupuesto establecido tienes la oportunidad de revisar las diferentes opciones disponibles. Para ello, puedes contratar a un corredor o agente de bienes raíces de confianza, buscar en internet y pasearte por las zonas más rentables. Es un proceso que amerita excelente asesoría, tiempo y dedicación. Otro opción importante relacionada con lo anterior, tiene que ver con la compraventa de inmuebles usados. Para este caso en particular sí te recomendamos un servicio de inspección técnica, una buena tasación para conocer el valor real del mercado y una atención personalizada que ya tenga una cartera de clientes con propiedades disponibles.
- Toma en cuenta la normativa, documentos y los trámites legales
Durante el proceso para comprar departamento o casa hay que manejar una cantidad considerable de papeleo para lograr el objetivo final. En principio, incluye aspectos como la reserva, la promesa de compraventa, póliza de seguro, crédito o subsidio hipotecario, escritura y especificaciones. Esto también incluye multas, obligaciones, garantías, certificaciones y más. Esto no significa que sea un proceso complejo, sino más bien que requiere una adecuada organización para cumplir a cabalidad con todos los pasos. En el caso de viviendas nuevas, la meta consiste en obtener la oficialización de estos documentos mediante la recepción final municipal que otorga la Dirección de Obras Municipales. Una vez más, si piensas adquirir una vivienda para invertir u ocupar, tienes que estar empapado sobre las distintas etapas de este procedimiento. Como hemos aclarado anteriormente, si bien no hace falta ser un experto para cumplir con los requisitos exigidos, la consultoría oportuna está para darte las herramientas que necesitas. Comprar departamento o casa por primera vez puede ser todo un reto cuando no se cuenta con la información y la preparación adecuadas. El mercado de bienes raíces tiene una dinámica que va variando en función de la demanda, gobiernos y variables económicas, por lo que debes ajustarte constantemente a los cambios de tramitaciones y su marco legal.
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