Mientras que en el pasado esto parecía un sueño exclusivo de aquellos que ganaban mucho más, la situación parece haberse “democratizado” un poco más. Esto se vió reflejado el año pasado en las cifras, las cuales advirtieron un aumento en la demanda de arriendo del 47% con respecto al 2015 y este año sigue siendo fuerte. Otra explicación que da fundamento a esta tendencia en crecimiento, tiene que ver con un mayor acceso a las diversas formas de créditos hipotecarios disponibles. Si bien existen algunas restricciones en este sentido, las personas que cuentan con un sueldo promedio disponen de alternativas accesibles para hacerse de una propiedad rentable. Muestra de estos argumentos es que zonas como San Miguel, San Joaquín, Estación Central, y Quinta Normal cuentan con mucha disponibilidad de ofertas. Además, en La Serena y Coquimbo tienes la posibilidad de generar ganancias importantes relacionadas con el turismo vacacional y la vida universitaria.
Si estás decidido a convertirte en propietario de una casa o departamento y no tienes intenciones de mudarte, puedes pagar las cuotas del crédito hipotecario arrendando la propiedad. Como dispones de un plazo de hasta 30 años para pagar, ésta ventaja representa un negocio redondo para cualquiera interesado en iniciarse en la inversión inmobiliaria. Más allá de la puesta en oferta, el manejo de inquilinos o las zonas idóneas que puedes dejar en manos de expertos en bienes raíces, solo tienes que preocuparte por la fórmula: comprar para arrendar. Lo demás está en conocer un poco dónde están las oportunidades más rentables y saber qué inmuebles están teniendo mayor demanda. En este sentido, hay una clara indicación que los departamentos que incluyen 1 o 2 dormitorios son los más codiciados y que presentan mayor salida. Esto resulta conveniente para cualquier inversionista que esté buscando propiedades que no sean tan costosas y que podrían arrendar a familias pequeñas, a estudiantes o profesionales jóvenes. Con una estimación de crecimiento que ronda el 4 y 5% anual y a sabiendas que los arriendos subieron un 1,8% este año, son números llamativos desde el punto de vista financiero. Esta perspectiva se complementa con la estimación de que los precios seguirán aumentando y cada vez más personas están prefiriendo arrendar un hogar. Ahora ya sabes que comprar para arrendar puede significar una gran opción para crear un patrimonio rentable y/o asegurar tu futuro.