Elegir al corredor inmobiliario correcto es una de las decisiones más importantes en el proceso de comprar o vender una propiedad. Pues él será el profesional encargado de guiar todo el convenio inmobiliario, por lo que una buena elección es vital para asegurar satisfactoriamente el cierre del negocio. Además, es sumamente importante que el corredor inmobiliario escuche y comprenda en su totalidad las necesidades del comprador. Así podrá ofrecerle un abanico de posibilidades que se ajuste perfectamente a su perfil. Por esa razón, te comentamos qué aspectos considerar al elegir a un corredor inmobiliario.
Cualidades de un buen corredor inmobiliario
Si vas a encargarle a un tercero todo el proceso de la compra o venta de una propiedad, asegúrate de tomar la decisión más certera. Fíjate en las cualidades esenciales que todo buen corredor inmobiliario debe reunir:
buen currículum y referencias
Tener referencias de quién está llevando el proceso de compra de tu vivienda es la mejor forma de asegurarse de que se trata de la persona correcta. Por eso, procura mirar su currículum para conocer acerca de sus estudios, de su experiencia laboral y de sus habilidades. En el mejor de los casos, si puedes contactar con sus antiguos clientes o si el corredor inmobiliario tiene algún perfil online. Por allí puedes mirar las calificaciones y comentarios que otros clientes le han dejado. La idea es que conozcas el historial de quien podría ser tu asesor inmobiliario.
Conocimientos del sector
Un buen corredor inmobiliario es capaz de hablar cómodamente sobre la industria, así como comentar sobre las variables que podrían afectar una inversión. En este sentido, se trata de comprobar qué tantos conocimientos tiene el profesional a tal punto de poder guiar un proceso de compra o venta de una propiedad. Y en todo momento debe comentar sobre cómo cuidar la rentabilidad de la inversión. Básicamente, el corredor correcto sabe muy bien cómo es su industria y cómo trabajar en ella para sacar el máximo provecho posible.
Seguridad en sí mismo
La descripción de sí mismo y la expresión corporal dice mucho de un corredor inmobiliario. Por lo tanto, este debe proyectarse seguro de sí mismo, inspirar confianza, ser cordial y agradable al conversar. De esta forma podrás comunicarle exactamente qué buscas en una propiedad, lo más seguro es que te escuche y te entienda a la perfección.
Buena presencia
Por supuesto, la primera imagen que transmite un corredor inmobiliario debe ser sumamente profesional. Pues si cuida aspectos tan básicos como la higiene y la estética en vestimenta, entonces demuestra que se preocupa por atender hasta el más mínimo detalle. Además, esto da muestras de su nivel de profesionalismo y compromiso para con su trabajo. El corredor inmobiliario es parte fundamental en toda transacción inmobiliaria. Pero, no todos los que están en el mercado son tan buenos como dicen. Asegúrate de escoger el correcto para aumentar las probabilidades de éxito de tu negocio o inversión.
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